Las mujeres prefieren abortar por procedimiento instrumentado a hacerlo con pastillas.
Ocho de cada diez mujeres prefieren abortar con el método instrumental que, con el farmacológico, ya que lo consideran más rápido, seguro y menos doloroso, las mujeres revelan tener menos intensidad dolor en el proceso y menos síntomas posteriores, también manifiestan que presentan un menor porcentaje de complicaciones utilizando este método.
Las que eligen interrumpir su embarazo con fármacos lo hacen por miedo a la intervención instrumental, y porque estiman que es menos agresiva y traumática.
Todas las conclusiones nacen de un estudio que hicieron clínicas aprobadas para la IVE a cerca de 1.000 casos, varias de estas fueron invitadas a realizar un test sobre los factores que las llevaron a elegir el método y el grado de satisfacción después de terminado el procedimiento.
Tras muchas experiencias recientes en clínicas privadas el método instrumental gana a las pastillas, este resultado puede parecer viciado por la naturaleza de quien realiza el estudio, pero sin embargo se aclara que en el informe no existe conflicto de intereses y los profesionales de las clínicas creen que ambos métodos son adecuados si la mujer lo elige, y no existe un interés económico a la hora de orientar a las mujeres, pues el costo económico y la remuneración es igual en cualquiera de los casos.
Las 1.000 mujeres que fueron entrevistadas, 784 se está hablando del 78% eligieron método instrumental, y 219 que equivale al 22% el método farmacológico.
Por rapidez del método y eficacia es que las mujeres prefieren elegir el quirófano, frente a las horas y dias que deben esperar y la posibilidad de fallo con la manera farmacológica. Un 71% de las que eligen el método instrumental lo hacen por lo inmediato y seguro, el 12% de las que se inclinan por este método dicen que es menos doloroso que el farmacológico.
Las que prefieren el proceso instrumentado dicen que no quieren tomar medicación y suponen que los fármacos tienen efectos secundarios, las que prefieren el método con medicación citan el boca a boca también como razón para optar por este método.
Si no se trata del primer aborto, los datos de este estudio marcan un dato relevante, el método instrumental es más repetido que el farmacológico, de 285 mujeres que utilizaron la vía instrumental habiendo tenido abortos previos un 92% repitió este procedimiento, solo cambio al otro método el 8%, de 69 mujeres que utilizaron el método farmacológico habiendo tenido otros abortos solo el 47% volvió a utilizar esa vía, el 53% cambio al método instrumental.
La mayoría un 56% que se inclinaron por las pastillas argumento miedo a la intervención quirúrgica, y el 20% manifestó que las pastillas les parecían menos agresivas y menos traumáticas que el otro método.
Este informe concluye que la edad, número de hijos, y en una menor medida las semanas de gestación son determinantes a la hora de elegir un método, el perfil de quienes optan por la vía farmacológica es de una mujer joven que no tiene hijos y con cuatro semanas de gestación, en cambio en mayoría las que eligieron el método instrumental son mujeres maduras y con hijos, aunque en este caso es independiente las semanas de gestación, es muy significativo que a mayor edad y mayor número de hijos las mujeres prefieren el método instrumental.
Ambos métodos causan dolor, el 86% de las mujeres que abortaron con medicación manifestaron que sintieron dolor, contra un 82% de mujeres que abortaron de manera instrumental que manifestó también haber sentido dolor, pero la intensidad del dolor fue mayor con seis puntos de medida con el primer método, mientras que con el segundo método fue de 2,5, en los días posteriores un 68% de las mujeres que usaron el método farmacológico tuvieron molestias, mientras que un 51% que utilizaron el otro método manifestaron haber tenido molestias después del procedimiento.
Síntomas como Dolor, vómito, náuseas, escalofríos, mareo o diarrea fueron citados en una más medida por mujeres que abortaron con medicamentos, las complicaciones tales como un embarazo evolutivo o restos ovulares se dieron en un 20% de los casos del método farmacológico, y un 0,50% por vía instrumental.